pelleja, pelleja el pajariuco
trae el claro la ventura
si trina ronco a la mala
Ellos han truncao a un niño tonto
y con el gesto del enamorado
cosieron sus fauces
Atraviesa, se enreda la seña
la lengua indica así
un secreto
pelleja, pelleja el pajariuco
aullan las chillpilas al poniente
tejen convulsas
lo que en un tiempo
llamaban herejía
Ansiosas de verle
desean morir
pelleja, pelleja el pajariuco
tira al sueño los rincones
Davitú, Quelquevú
buscan de memoria
lo cubierto por el barro
Davitú, Quelquevú
casi me muerdo
el nombre.
martes, 10 de mayo de 2016
domingo, 1 de mayo de 2016
aguamiento
Con lacerante devoción
a la endemoniada de ese Santiago de 1857
.
decían que se había comido un vaso de vidrio entero, que se lo sabía zampado hasta la simiente. Por fiarle el alma al Mandinga, se perdía en los portales, esos nombres que enamoran: el Tonto azulado callaba y entre un sordo rechinar de dientes, le decía bien despacito al oído estaca, estáca, mirando al Cristo que colgaba de la pared con los brazos abiertos. Abrazada, le pasaban los días, hasta que llegaba el otro. Nito-nito, le torcía a besos la espalda, y lloraba con toda sus fauces como si fueran puertas. Nito, nito, bonito. O c é a no. Le leía el pensamiento, niña, no le guarda lealtad a nadie.
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