sábado, 26 de abril de 2008

tonos sol de invierno y el amarillo otoñal

Los días con tonos sol de invierno son los mejores...

Me sentí tan cercana hoy a esa gente, o a lo mejor siempre lo he estado pero no me detuve a observar .

Creo que el amarillo de mi chaqueta lo favoreció todo, era un amarillo espléndido.Todos los niños pequeños se volteaban a mirar el color que impregnaba todo. Las veredas se hicieron más anchas, incluso mis piernas pesaban menos y se elevaban recorriendo la urbanidad de providencia.

Mañana será igual, pero distinto.

lunes, 21 de abril de 2008

"No puedo dibujar menos perdonar, mientras manipulas me voy a recorrer las calles a pie, encontrando los momentos claros, definiendo la mejor bajada."

no

lunes, 14 de abril de 2008

Ese gran simulacro

"Cada vez que nos dan clases de amnesia
como si nunca hubieran existido
los combustibles ojos del alma
o los labios de la pena huerfana
cada vez que nos dan clases de amnesia
y nos conminan a borrar
la ebriedad del sufrimiento
me convenzo de que mi región
no es la farándula de otros

en mi región hay calvarios de ausencia
muñones de porvenir/arrabales de duelo
pero también candores de mosqueta
pienos que arrancan lágrimas
cadáveres que miran aún desde sus huertos
nostalgias inmoviles en un pozo de otoño
sentimientos insoportablemente actuales
que se niegan a morir allá en lo oscuro

el olvido está tan lleno de memoria
que a veces no caben las remembranzas
y hay que tirar rencores por la borda

en el fondo el olvido es un gran simulacro
nadie sabe ni puede/ aunque quiera/ olvidar
un gran simulacro repleto de fantasmas
esos romeros que peregrinaran por el olvido
como si fuese el camino de santiago

el día o la noche en que el olvido estalle
salte en pedazos o crepite/
los recuerdos atroces y los de maravilla
quebrará los barrotes de fuego
arrastrarán por fin la verdad por el mundo
y esa verdad será que no hay olvido."


martes, 8 de abril de 2008

las hojas del otoño

La brisa otoñal apenas alcanza a rozar mi cara. Las hojas caídas me hacen recordar lo linda y extraña que es la añorada estación.

Porque el otoño acarrea una serie de acontecimientos que derivan en algo realmente grande a través de los fríos meses.

Cada hoja que cae en la acera de la calle que solía pasar, lleva escrito en su superficie memorias ilegibles.
Es como el papel roneo que antes nos daban impreso en el colegio , de tonos cafés y una mezcla fría-cálida. Evoca la nostalgia . El sabor de la nostalgia de cada hoja que revolotea al lado de los transeuntes.